sábado, 16 de enero de 2010

La Xunta financiará la construcción del mercado provisional con 450.000 euros

La Xunta financiará la construcción del mercado provisional con 450.000 euros
El Ejecutivo eumés desconoce por el momento cuál será la ubicación de la plaza de abastos que albergará a 25 placeros mientras duren las obras de rehabilitación del edificio municipal.

La Xunta financiará la construcción del mercado provisional del Concello de Pontedeume, que albergará a los placeros de la actual plaza de abastos mientras se llevan a cabo las obras de reforma del actual mercado situado en la plaza de O Conde. Así lo anuncia el alcalde del municipio, Gabriel Torrente, que adelanta que el Gobierno gallego sufragará esta actuación con 450.000 euros.

El regidor adelanta también que este mercado provisional está pendiente de ser sacado a concurso y explica que aunque se barajan distintas posibilidades para su ubicación, de momento, se desconoce cuál será la definitiva. Para ello son necesarios una serie de informes de la Policía local sobre cuestiones de seguridad y tráfico que se elaborarán próximamente.

Dos de las opciones que suenan con más fuerza son la calle Betanzos y la plaza de O Conde pero, tal y como advierte el alcalde, la decisión final tiene que ser muy meditada ya que no se trata de una solución para "unos días", si no que este mercado estará en funcionamiento durante el tiempo en el que se prolonguen las obras de reforma de la actual plaza de abastos.

Mientras tanto, el Gobierno local manifiesta que continúa con la búsqueda de financiación para la rehabilitación del recinto actual, que ya cuenta con un proyecto realizado por la empresa semipública Mercasa, que asciende a dos millones de euros. Se trata de un proyecto ambicioso, que busca convertir la plaza en un espacio abierto, unificado, luminoso y llamativo, en donde los puestos de los 25 placeros que trabajan en la actualidad en el mercado eumés estén reagrupados por oficios y se dé relevancia a la exposición de productos y la venta al público.

La empresa redactora se vio obligada a realizar el proyecto en base a una condición de la Dirección Xeral de Patrimonio: diferenciar arquitectónicamente la parte antigua del mercado de la nueva, aunque en su interior sea un único edificio. Ambas partes estarán unidas por un gran pasillo de techo acristalado, que aportará mucha luz al edificio y unificará su uso interno. Además el edificio que acoge la Oficina Agraria será eliminado y la parte superior del mercado acogerá una plaza pública.

Otro de los cambios con respecto ala actualidad será la eliminación de la zona de carga y descarga de mercancías que se realiza en la parte frontal del mercado, que se llevará a cabo en la parte superior del recinto, junto a la futura plaza.

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